11 de abril de 2012

PSTLA


Y cuando menos te lo esperas, cuando crees que todo va en el sentido equivocado, que tu vida, programada en cada mínimo detalle está naufragando... de repente, sucede.

Sienta bien pensar en el pasado cuando el futuro da miedo.
Pensar que no todo puede ser destruido solo por un simple y temporal imprevisto.